El Espacio

Situado en la Calle Provincial 151 de Cassà de la Selva, en el antiguo almacén conocido como Can Jeroni Ros.

El local está completamente reformado, se ha conservado su esencia y se ha adecuado para la producción de licores. Por ejemplo, se han repicado y rejuntado las paredes y se ha mantenido la viga central, puesto que esta viga está hecha con remaches de principios del s.XX. Data de la misma época que el puente de Eiffel en Girona.

El espacio había sido un almacén de tapones de corcho. Por este motivo, cuando se decidió reformarlo, se encontraron una serie de máquinas muy antiguas de tapones que restauramos y están expuestas.

En el obrador hacemos producciones cuidando al máximo la calidad. Nos gusta realizar el trabajo muy bien hecho para lograr la excelencia del producto.

Eventos

Qué hemos hecho…

El tapón de corcho

La ratafía Malhivern ha sido la primera ratafía comercial embotellada íntegramente en tapón de corcho natural. Son tapones naturales a medida y de la mejor calidad.

Es una ratafía que quiere reivindicar el uso del tapón de corcho, como elemento vivo que permite la microoxigenación del licor y que ayuda a envejecer la ratafía con el paso de los años. El corcho es un producto natural, reciclable y orgánico. Además, estamos en tierra de tradición corchera y creemos que es la mejor forma de reivindicar el territorio y ayudar a la economía local.

Son tapones de corcho natural, conocido como corcho del país. Es un tipo de corcho muy apreciado por las grandes bodegas de Francia y se conoce como corcho del país porque proviene de Cataluña, mayoritariamente del Macizo de las Gavarres, Guilleries o de la Sierra de la Albera.

Este corcho se caracteriza por la legislación catalana, que limita la pela del alcornoque a 14 años, es decir: entre pela y pela, deben pasar un mínimo de 14 años. Esto le confiere unas características únicas y muy apreciadas. En primer lugar, el tapón de corcho es más denso, más tupido, lo que permite una microoxigenación ideal (ni demasiado, ni demasiado poca). En segundo lugar, una vez se ha quitado la primera capa del árbol (el peregrino), éste tiene 14 años para fortalecerse y madurar hasta el momento de la pela, que suele ser a principios de verano. Esto significa que, cuando se pela, el nivel de afectación por estrés hídrico (para dejarlo al descubierto) es el mínimo posible. Y, en tercer lugar, la elevada intensidad del tapón permite que se ajuste a la perfección al cuello de la botella de vidrio.

Y, finalmente, queremos subrayar que, embotellando con corcho natural, estamos ayudando a conservar el oficio de pelador de corcho, a que los propietarios de bosques de alcornoque estén dispuestos a mantenerlos limpios y bien cuidados, a que los alcornocales no desaparezcan de nuestras montañas, a que el biotopo a su alrededor (flora y fauna vinculada) se mantenga, a evitar el riesgo de incendios (ya que el bosque de alcornoque tiene una elevada capacidad de resiliencia al paso de un incendio y de regenerarse) y así potenciamos también la economía de las empresas vinculadas a este sector.